En 1989 escribí mi primera carta a la prensa, de la que no guardo el recorte, pero, de la que sí recuerdo su contenido. A partir de ese momento, no he dejado de escribir. Desde el 27 de marzo de 2012, hasta el 26 de marzo de 2013, día a día, durante un año completo, fui insertándolas en este blog.
AMIGO SANTOS: HAY CUESTIONES QUE SE VEÍAN VENIR, POR EJEMPLO TODO LO QUE SE AVECINABA, AUNQUE ALGUNOS NI SIQUIERA ACERTABAN A DISCERNIR. AQUI TE MANDO UN ARTICULO PUBLICADO, UN POCO IRÓNICO, DE LA SITUACIÓN EN EL 2000.
“LA NUEVA ECONOMÍA”
La verdad es que con esto de la Nueva Economía uno se desorienta en la penumbra. Hasta no hace mucho, algunos nos considerábamos con ciertos conocimientos empresariales y contables, conceptos hoy casi anacrónicos, tales como el Debe y Haber, etc. Sobre todo, cierta generación que mamamos de las ubres del conocimiento en aquel centro del saber con Salvador Piñero Ferrer. Pero como aquellos postulados del Instituto de Contabilidad de Madrid, no tienen nada que ver con las nuevas tecnológicas encabezadas por Internet, o sea ese New Look tipo Villalonga; pues eso, que a más de uno se nos va la olla con estos subibajas bursátiles, con esas fusiones y transfusiones imprevisibles, Aunque para fusiones, como decía mi amigo Manuel el falangista, -... yo la única fusión que tengo noticias, fue la gloriosa fusión propiciada por el Caudillo, es decir la F.E.T. y de las JONS. Pero esta es otra historia. Hay que ver cómo prolifera esto de las fusiones: que si el BBV con Argentaria, o el BC con Hispano y más adelante con el Santander, que si Telefónica se quiere casar con BBVA, y luego la abandona al pie del altar, porque no le agrada la novia al suegro; que si nace una hija no deseada: Terra, y desea que papá le compre un juguete, nada menos que el tercer portal americano (no el del vetusto edificio de la Gran Vía madrileña). Claro que aquí lo importante del asunto es que por cuatro perras, dos billones y pico, se van a permitir el lujo de ser los cuartos de Internet. De ahí lo de cuarto portal. En resumen, un gran culebrón económico. Unas migajas de nada. Si lo traducimos a euros sólo asciende a unos cientos de miles de millones de nada, pese a que la empresa Lycos, la adquirida, perdió el año pasado más de once mil millones; esta minucia no importa, pues Mr. Villalonga, a pesar de su aspecto de boxeador de tres al cuarto, se ve que es un tipo avispado y debe saber lo que hace. Dicen que se parece algo al Sr. Conde, aunque éste haya quedado en mantillas y coleando. Aureola de triunfadores, admirados por los ciudadanos de a pie y respetados por los mass-media, aunque el primero con pinta de chuleta engominado y el otro con aspecto de bondadoso matarife... /.. Lo cierto es que los tiempos cambian y el estereotipo del ‘hacker’ de los ochenta, encarnado tan fielmente en el cine por el seductor Richard Gere en la edulcorante Pretty Woman ha quedado lejos. Ahora como los bancos no dan un duro por los plazos fijos, y el internet ese, ha democratizado y globalizado hasta la bolsa mercantil, todo el mundo juega a las acciones como si fuera un bingo cualquiera. El lechero de la esquina, con eso de tener que ordeñar a todas horas las vacas, tiene permanentemente enchufado el internet, especulando cuando los índices de Tokio empiezan a cantar por la madrugada europea hasta New York. -Hay que andarse con ojo-, me asegura, —pues el dios Mercado puede levantarse cualquier día con la bragueta torcida y adiós ahorros de toda la vida—. En fin, como decía al principio, lo mareante, lo que no alcanza uno a entender, es que con los problemas tan importantes que acucian a nuestro país y a nuestra región aún más y si me aprietan a nuestra endémica comarca en particular (Noroeste de Murcia), ya podría este Villalonga invertir unas migajas de alguna transacción sobrante o de alguna mísera empresa deficitaria de esas fusionadas o transferidas al índice Ibex 2 o 3, o el Nikkei o como coño se llame (perdón). Aquí los salarios serían bastante más bajos que los que pagan sus empresas, seguro que el déficit lo convertiríamos en superávit y además lo nombraríamos hijo adoptivo predilecto del Noroeste. Luego manifestaría indignado Ramón el Gato: — ¡Qué catetos somos en este pueblo! ¡Mira que nombrar siempre hijos adoptivos a los forasteros...! — Antonio González Noguerol - 23.02.2000
Muchas gracias, Antonio, no sólo un placer, un lujazo contar con este artículo tuyo. Me encanta eso de: "pues el dios Mercado puede levantarse cualquier día con la bragueta torcida y adiós ahorros de toda la vida", sin embargo, en mi opinión, es el falso argumento del gran engaño planetario. Un abrazo.
El placer es mio como siempre. Y por favor, no hagas caso de esa gente, como dice aquel viejo axioma: "Si ladran, Sancho, es señal que cabalgamos". Un abrazo y sigue tan clarividente y tan valiente. Antonio.
AMIGO SANTOS: HAY CUESTIONES QUE SE VEÍAN VENIR, POR EJEMPLO TODO LO QUE SE AVECINABA, AUNQUE ALGUNOS NI SIQUIERA ACERTABAN A DISCERNIR. AQUI TE MANDO UN ARTICULO PUBLICADO, UN POCO IRÓNICO, DE LA SITUACIÓN EN EL 2000.
ResponderEliminar“LA NUEVA ECONOMÍA”
La verdad es que con esto de la Nueva Economía uno se desorienta en la penumbra. Hasta no hace mucho, algunos nos considerábamos con ciertos conocimientos empresariales y contables, conceptos hoy casi anacrónicos, tales como el Debe y Haber, etc. Sobre todo, cierta generación que mamamos de las ubres del conocimiento en aquel centro del saber con Salvador Piñero Ferrer.
Pero como aquellos postulados del Instituto de Contabilidad de Madrid, no tienen nada que ver con las nuevas tecnológicas encabezadas por Internet, o sea ese New Look tipo Villalonga; pues eso, que a más de uno se nos va la olla con estos subibajas bursátiles, con esas fusiones y transfusiones imprevisibles, Aunque para fusiones, como decía mi amigo Manuel el falangista, -... yo la única fusión que tengo noticias, fue la gloriosa fusión propiciada por el Caudillo, es decir la F.E.T. y de las JONS. Pero esta es otra historia.
Hay que ver cómo prolifera esto de las fusiones: que si el BBV con Argentaria, o el BC con Hispano y más adelante con el Santander, que si Telefónica se quiere casar con BBVA, y luego la abandona al pie del altar, porque no le agrada la novia al suegro; que si nace una hija no deseada: Terra, y desea que papá le compre un juguete, nada menos que el tercer portal americano (no el del vetusto edificio de la Gran Vía madrileña). Claro que aquí lo importante del asunto es que por cuatro perras, dos billones y pico, se van a permitir el lujo de ser los cuartos de Internet. De ahí lo de cuarto portal. En resumen, un gran culebrón económico. Unas migajas de nada. Si lo traducimos a euros sólo asciende a unos cientos de miles de millones de nada, pese a que la empresa Lycos, la adquirida, perdió el año pasado más de once mil millones; esta minucia no importa, pues Mr. Villalonga, a pesar de su aspecto de boxeador de tres al cuarto, se ve que es un tipo avispado y debe saber lo que hace. Dicen que se parece algo al Sr. Conde, aunque éste haya quedado en mantillas y coleando. Aureola de triunfadores, admirados por los ciudadanos de a pie y respetados por los mass-media, aunque el primero con pinta de chuleta engominado y el otro con aspecto de bondadoso matarife... /.. Lo cierto es que los tiempos cambian y el estereotipo del ‘hacker’ de los ochenta, encarnado tan fielmente en el cine por el seductor Richard Gere en la edulcorante Pretty Woman ha quedado lejos. Ahora como los bancos no dan un duro por los plazos fijos, y el internet ese, ha democratizado y globalizado hasta la bolsa mercantil, todo el mundo juega a las acciones como si fuera un bingo cualquiera. El lechero de la esquina, con eso de tener que ordeñar a todas horas las vacas, tiene permanentemente enchufado el internet, especulando cuando los índices de Tokio empiezan a cantar por la madrugada europea hasta New York. -Hay que andarse con ojo-, me asegura, —pues el dios Mercado puede levantarse cualquier día con la bragueta torcida y adiós ahorros de toda la vida—.
En fin, como decía al principio, lo mareante, lo que no alcanza uno a entender, es que con los problemas tan importantes que acucian a nuestro país y a nuestra región aún más y si me aprietan a nuestra endémica comarca en particular (Noroeste de Murcia), ya podría este Villalonga invertir unas migajas de alguna transacción sobrante o de alguna mísera empresa deficitaria de esas fusionadas o transferidas al índice Ibex 2 o 3, o el Nikkei o como coño se llame (perdón). Aquí los salarios serían bastante más bajos que los que pagan sus empresas, seguro que el déficit lo convertiríamos en superávit y además lo nombraríamos hijo adoptivo predilecto del Noroeste.
Luego manifestaría indignado Ramón el Gato: — ¡Qué catetos somos en este pueblo! ¡Mira que nombrar siempre hijos adoptivos a los forasteros...! —
Antonio González Noguerol - 23.02.2000
Muchas gracias, Antonio, no sólo un placer, un lujazo contar con este artículo tuyo. Me encanta eso de: "pues el dios Mercado puede levantarse cualquier día con la bragueta torcida y adiós ahorros de toda la vida", sin embargo, en mi opinión, es el falso argumento del gran engaño planetario. Un abrazo.
ResponderEliminarEl placer es mio como siempre. Y por favor, no hagas caso de esa gente, como dice aquel viejo axioma: "Si ladran, Sancho, es señal que cabalgamos".
ResponderEliminarUn abrazo y sigue tan clarividente y tan valiente.
Antonio.