Publicado en El País (pinchad para ir a la página)
CARTAS AL DIRECTOR
Escarnio
Se difumina el encanto. Pensábamos que no sería necesario esperar a que la historia hiciese justicia, que seríamos testigos de ello. El asunto comienza a tocar fondo del modo más cínico y mezquino que imaginar hubiésemos. Al retomar la película de cómo han transcurrido los hechos, se comprueba que todo obedece a un bien planeado y orquestado guión por parte de los Gobiernos que han manejado la escenificación: Gran Bretaña, España y Chile, con el triangular ojo de EEUU supervisando que todo transcurriese por una estrechísima senda, sin apenas espacio para maniobrar, que aunque en ocasiones nos pareció laberíntica, paradójicamente, no dejaba de ser una alucinación producto de la euforia. La senda, al fin, se nos presenta completamente lineal. Esto es lo que hay; cuando todo indicaba que la justicia sería incapaz de burlar a la humanidad, que una vez puesto en el disparadero no saldría indemne el ajusticiado, la realidad, que casi siempre va por delante, nos hace poner los pies en el suelo y comprender que la sinrazón suele ser dueña de la Historia.Lanzó en su día el poeta a los cuatro vientos un ojalá que ahora retomo, pero no para que pase algo que te borre de pronto, todo lo contrario, para que vivas lo necesario para que los descendientes de tus víctimas puedan verte en un estrado siendo juzgado por todos tus crímenes.- Murcia.
El País. 30 Enero 2000.
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